Por una Estrategia para el Fomento del Libro y la Lectura

La Asociación de Librerías de Zaragoza acudió a la convocatoria de la Dirección General de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza para sumarnos al proceso participativo que lleve a los agentes del sector del libro a definir las Estrategias del Libro y la Lectura. El objetivo es lograr diseñar una política cultural para la promoción del libro y el fomento de la lectura. La respuesta de asociaciones y colectivos relacionados con el sector fue positiva. Alrededor de cincuenta personas entre editores, libreros, bibliotecarios, escritores, ilustradores, dibujantes de cómic, diseñadores, periodistas culturales, clubes de lectura, profesores, universidad así como representantes de distintas administraciones y partidos políticos comenzaron en el Museo Pablo Gargallo un camino que no se antoja sencillo y con el que se quieren acercar posturas. Entre los asistentes Paco Goyanes, de Librerías Cálamo; César Muñío, de Librería París; Eva Cosculluela, de Librería Los Portadores de Sueños, y Victor Casanova, de Librería Central, que acudió en representación de los distribuidores.

Fue la primera de tres reuniones con las que Fernando Rivarés, Concejal de Hacienda y Cultura; Saúl Esclarín, Director General de Cultura del Ayuntamiento, e Ignacio Celaya, Coordinador del Área de Derechos Sociales, dieron el pistoletazo de salida a un proceso con la ilusión de encontrar puntos en común con los que lograr aúnar los muchos recursos que tiene la ciudad, que son ricos y variados. Sólo así, dijo Rivarés, se conseguirá llegar a nuevos públicos, que haya más creadores, que nazcan nuevas empresas y se generen nuevos hábitos de lectura. Para ello pidió mucha imaginación. Y mucha tendrá que ser porque es cierto que la ciudad tiene recursos culturales pero económicos no. Eva Cosculluela, en calidad de presidenta de la Asociación de Librerías de Zaragoza, señaló la necesidad de fijarse en otros planes municipales del libro y la lectura de ciudades como Sevilla o Valencia, y la importancia que adquiere el respaldo económico. A pesar de esta traba, que es evidente que lo es para poner en marcha cualquier plan cultural y empresarial, intentaremos aportar y señalar lo que pensamos que es necesario para las políticas culturales del libro y la lectura en la ciudad.

Las dos siguientes reuniones tendrán lugar en el nuevo espacio municipal para la participación activa La Harinera, en el barrio de San José. El lugar de creación y colaboración en el que nos mancharemos las manos con la tinta de los libros.